¡Buenos días una vez más! Parece que este mes lo elfos traidores se han puesto de acuerdo y es que aparecen de nuevo en la escalada de los lectores esta vez con Cneus. Pero no es lo único, ya que como sabéis los habituales, tiene la costumbre de ponernos los dientes largos con distintas cosas.
¡Buenas a todos!
Otros dos meses que han pasado y
ya estamos a mitad del año. No sé a vosotros, pero a mí el tiempo me ha volado.
En este bimestre he tenido bastantes viajes de trabajo, he pasado una semana en
Cantabria visitando a la familia política y he dedicado bastante tiempo a
vigilar a mi hija, que ha empezado a gatear y es un peligro constante.
Ya sé que aquí venimos a ver
minis pintadas, pero os cuento todo esto porque junio ha sido muy poco
productivo y necesito poner excusas. Afortunadamente, en mayo pude pintar
bastante así que tengo cosillas que enseñaros.
Nota de Cordo: Yo venía a por las excusas, me ayuda saber que no solo me pasan cosas a mí :P
Pero, antes de nada, el balance.
Han entrado 3 minis (la cajita de héroes élficos, que viene con piezas para
montar un héroe a pie y otro montado, siendo uno de ellos portaestandarte de
batalla). No era una compra que tuviera planificada, pero siempre cae algo en
la tienda de hobby de Torrelavega cuando me paso por Cantabria, y en esta
ocasión fue esta caja.
A cambio de esas 3 entradas, he
pintado 33 minis, llevando el balance anual a 59 miniaturas menos por pintar.
Y sin más preámbulos, veamos esas
33 minis.
Siguiendo la línea de la anterior
entrada, continué restaurando mis viejos Altos Elfos. En esta ocasión comencé
con los lanzavirotes. El de la izquierda es el de metal de 2001, y no
hay mucho que comentar sobre él. El de la derecha, que salió en 2005, tuvo
bastante más trabajo. No la propia máquina, que es de plástico, sino la
dotación. Las minis estaban hechas un desastre, con partes insalvables, por lo
que tuve que tirar de otras piezas.
El del casco es el que conserva
más partes originales. Lo único que tuve que conversionar fueron los brazos, en
los que coloqué unos virotes hechos con lanzas y con las plumas de los virotes
que están en el carcaj. El otro miembro de la dotación es un Frankenstein
élfico: piernas de arquero, torso original, brazos de lancero, y cabeza de
auriga del carro de leones. En una mano lleva una espada silvana, y en la otra
le esculpí con masilla un catalejo.
Lo siguiente fue otra unidad
singular, la Guardia del Fénix. En este caso podéis ver foto del antes y
el después, así que ahora entendéis la necesidad de repintar este ejército xD.
Aquí me planteé el dilema de hacer las llamas de las capas naranjas o azules.
Lo llegué a preguntar en el grupo de whatsapp de escaladores (¡apúntate si aún
no estás dentro!) y hubo división de opiniones, así que al final me decidí por
las azules por coherencia con el esquema general del ejército.
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El antes |
En esta unidad hay un detalle que
supongo que a muchos habrá pasado desapercibido. Si os fijáis en la foto del
antes, veréis que solo hay 9 alabardas para 10 elfos, así que tuve que fabricar
otra alabarda. Como base utilicé una lanza del carro de Tiranoc, pero el agarre
de las manos estaba al revés, así que tuve que cortar cada mano, invertirlas y volver
a pegar los 3 trozos de la lanza. Con masilla verde le hice el remate de la
parte inferior del asta, y para la alabarda uní un hacha de bárbaro del Caos a
la hoja de la lanza. Sabiéndolo, ya podréis ver que se trata del segundo
guardia de la fila frontal, empezando por la izquierda. Pero si no llego a
decirlo probablemente no os habríais dado cuenta, así que estoy contento con el
resultado.
La última unidad restaurada fue
la que peor estaba, los Yelmos plateados. La foto del antes es una pena:
armas rotas, pegotes de pintura, pies mutilados… Tuve que hacer un trabajo de
restauración previo a la pintura en el que utilicé masilla verde y partes de
varias minis, entre ellas un caballero imperial, un guardia del bosque silvano
y piezas del carro y los lanceros.
El resultado me ha parecido el
más sorprendente de todas estas unidades. Los yelmos eran unas minis que me
parecían feas y a estas en particular las daba por desahuciadas (de hecho,
estuve a punto de comprar la caballería Lumineth de AoS para convertirla en mi
unidad de yelmos). Viéndolas ahora, en cambio, ya no me parecen malas minis. Al
contrario, me gustan bastante, y me llena de orgullo y satisfacción el haber
convertido esos engendros en una unidad bonita en mesa, haciendo justicia al
ejército con el que empecé hace más de 20 años.
Pero dejamos ya a los elfos y sus
pulcras armaduras para abrazar el óxido, la madera podrida y la carne hinchada:
¡nuestros queridos piratas zombis! En la anterior entrada pinté los cangrejos
inspirados en Tenacitas, y ahora me tocaba su hermano mayor, el Leviatán
putrefacto. Se trata de una mini de Highlands que está concebida como una
versión marítima del aracnarock, pero fue tan sencillo como sustituir a los
goblins por zombis piratas, y voilà, ya tenía mi leviatán.
Con varias referencias de
crustáceos reales a mano, me parecía que la clave era evitar que el
exoesqueleto del bicho tuviera un color uniforme, para lo que jugué con varias
veladuras de rojos para dar profundidad, y capas de naranjas y carnes en bordes,
protuberancias y pinzas, en las que añadí también negro para acentuar el
desgaste.
Los piratas y el barco los pinté
más rápido, siguiendo los mismos pasos que en las unidades de a pie y en el
Coloso Necrofex, respectivamente. Los jugadores del Total War reconocerán los
escudos que decoran la borda del castillo de popa.
La peana también siguió los
mismos pasos que la del coloso necrofex, con la salvedad de que en la parte
frontal la playa ya cede espacio al terreno de jungla. Es la peana más grande
del ejército, así que me sirve de transición entre el mar, la playa y la
jungla, los tres tipos de peana que tienen mis unidades de Costa del Vampiro.
Y esto es todo lo que he
terminado en estos dos meses en tema de pintura. A finales de mes también metí
mano a un maestro de la espada y un león blanco de Cracia, haciendo pruebas
para restaurar esas unidades, pero ya los enseñaré cuando pinte las unidades
completas.
Pero en el hobby no todo es
pintar minis. En el apartado de escenografía, algunos habéis visto ya que mi
ejército de enanos estaba expuesto en una estantería temática, decorada como la
entrada a un Karak. En su día, en lugar de utilizar poliestireno, usé cartón y
mezcla art attack (papel de cocina, agua y cola). En la foto no se ve del todo
mal, pero en persona se notaba demasiado lo precario del tema (o al menos, yo
lo notaba). Además, no me gustaban tampoco las runas que había sobre la puerta,
o haber utilizado un escudo redondo para decorar una entrada en la que solo
había líneas rectas.
Por todo esto, decidí romper toda
la pared de cartón y rehacerla con poliestireno. Aquí tenéis el proceso. Ya
está más avanzado, pero lo enseñaré cuando esté terminado.
También en estas últimas semanas
he instalado un estor con el mapa de la Tierra Media en mi habitación del vicio
(la que todos conocéis ya como la de la puerta secreta xD). No es warhammer,
pero me encanta y os lo tenía que enseñar xD.
Por último, en estos dos meses
solo he jugado una partida, mi Costa del Vampiro contra Culto de Slaanesh, como
parte de la campaña de Lustria. Los piratas lograron una masacre contra los
depravados druchii y avanzaron en el mapa para saquear un asentamiento.
Y eso ha sido todo por ahora. No
me quejo, la verdad. Llevamos la mitad del año y en cuanto a objetivos, como
veis en la tabla, estoy en un 56%. Ya he completado Altos Elfos y para la
próxima entrada espero haber terminado también la Costa del Vampiro (me quedan
algunos piratas zombis y sobre todo la Reina Bess).
Sobre los otros objetivos, de
Bretonia ya no me queda nada por pintar, así que tendría que comprar, y
Stormbringer ahora mismo no me apetece especialmente, así que lo más probable es
que siga con Altos Elfos, que es lo que más me está motivando. Pero eso ya lo
descubriremos en un par de meses.
¡Hasta la próxima escalada!
Jejejeje, Cneus multidisciplinar, como siempre 👌. Ya nos adelantaste a los escalistas tus avances con la guardia del fénix y el leviatán, y como entonces te digo que te han quedado de lujo: ambas capas están chulísimas, pero lo que más cuadraba con el esquema general era la azul, sin duda (lo cual no quiere decir que la roja fuese fea en absoluto), y del Leviatán, pues eso, una pasada de caparazón, y ahora que veo la popa del navío, pues mejor aún, pues esa madera podrida está muy conseguida, por no hablar de la propia peana... Ahora que lo pienso, quizá sería una buena cosa un enfrentamiento entre tus piratas y los Drucchi de Duffman que también están desembarcando... 🤔.
ResponderEliminarA mí los uelmos siempre me parecieron una unidad chulísima (ahora con unas proporciones algo difíciles, pero siempre me gustaron, y sí, si no llega a ser porque lo dices, no me doy cuenta de lo de esa alabarda reparada 😂😂😂.
¡Gean trabajo Cneus!
El bogavante putrefacto se sale. Me encanta que use los restos de un pecio de concha como si de un cangrejo ermitaño se tratara.
ResponderEliminarLa fortaleza enana también me gusta mucho. Sí tienes más fotos del proceso serían de gran interés para los que disfrutamos haciendo escenografía.
Un saludo