[Escalada de los lectores] La escalada de La Mesa Cuadrada: Agosto 2023

¡Muy buenas! Tal y como nos tiene acostumbrados Arturo, hoy va a reportar los progresos de los Caballeros de la Mesa Cuadrada en esta escalada de los lectores, y es que igual que se echa a la espalda la producción de escenografía, hoy nos va a dar unas lecciones sobre cómo se pintan unos orcos negros, best unit ever.

Saludos yonkis de la pintura.

Tras un duro verano volvemos a hacer acto de presencia en el blog para mostraros nuestros avances estivales, que no es que sean muchos, pero dan juego.

En el apartado de miniaturas me congratula poder informar que al fin he terminado de pintar orcos negros. Al menos por ahora. Posiblemente en un futuro tendré que ampliar los regimientos, así que aprovecharé esta escalada como recordatorio para mí yo del futuro.

ADVERTENCIA: Lo que van a ver a continuación está hecho por alguien con más tiempo libre del que es recomendable. No intenten hacerlo en sus casas.

En primer lugar decir que sentía una necesidad imperiosa de conseguir un buen trabajo de pintura con estas miniaturas, ya que, si no era por guapos, no sería por buenos que los incluyese en la lista. Cómo los orcos negros son básicamente una armadura con patas verdes mi plan de pintura pasaba por dedicar mucho trabajo a las armaduras. Partiendo de la base de que los orcos no destacan especialmente por el cuidado de su panoplia comencé por pintar toda pieza metálica a excepción de la cota de mallas en tonos óxido.

El primer paso fue aplicar sobre la imprimación negra una mezcla a partes iguales de marrón bichos y negro. 

Para lograr unos degradados suaves lo que hice fue humedecer primero la superficie que iba a pintar y después aplicar la mezcla ligeramente diluida. De esta forma evitamos que queden pinceladas, aunque también tenemos que contar con que después el color cubre menos.

La siguiente capa fue con marrón bichos, utilizando la misma técnica que en la anterior y procurando siempre hacer manchas que no cubran la totalidad de la pieza.

A continuación añadí otra capa con marrón cuero y algo de naranja, pero se me olvidó hacer una foto de este paso, así que vamos con el siguiente, que fue aplicar pigmento rojo óxido (pigmento del que venden para colorear el cemento, que funciona muy bien y por lo que cuesta un bote de Vallejo te llevas 1Kg) Aquí ya va cogiendo forma.

Pero lo que realmente le terminó de dar aspecto oxidado fue un pincel seco con metalizado. Tengo que decir que debía haber insistido más con el pincel seco en la armadura, por que mi idea era que el óxido se viese a través de los desconchones de la pintura y si no tiene una capa uniforme se pierde un poco el efecto, pero ya llegaremos a ese punto.

Por el momento el resultado me estaba gustando bastante y llegué a barajar el dejarlos así, pero el plan ya estaba en marcha así que decidí inmortalizar para la posteridad a la unidad sacándoles una foto antes de cruzar el punto de no retorno.

Ferruñosos de Grimgor

Nota de Cordo: Sí, así ya hubieran molado cantidad.

Tras un merecido descanso puede armarme de valor para continuar con la salomónica tarea, ya que en total este proceso se llevó a cabo sobre 17 miniaturas simultáneamente.

La siguiente tarea y una de las más importantes era barnizar muy muy muy bien todas las miniaturas para permitir que, llegado el momento, las siguientes capas se desprendan con facilidad sin dañar las anteriores, así que una vez me hube cerciorado de que todos los detalles estaban completamente pintados apliqué a pincel 3 buenas capas de barniz brillante. Era el momento de explayarme pintado armaduras.

Y ya por fin y tras varios meses con la mesa de pintura invadida por una horda de orcos negros, llegué al último paso del proceso y el más divertido: Arrancar la pintura de las armaduras.

Para ello solo necesitaba un pincel viejo con el que, tras humedecerlo un poco, frotaba las partes más susceptibles de haberse desconchado. De vez en cuando y utilizando un pincel limpio, agua y una servilleta, limpiaba los restos de pintura que se iban desprendiendo. Está parte va muy rápido y en una tarde pude hacérselo a todo el regimiento.

Cuando pensé en hacer todo esto buscaba que las miniaturas fueran ganando detalle a medida que las miras más y más cerca. Ahora que veo las miniaturas a través de la lente de una cámara puedo decir con orgullo que al menos ese objetivo ha sido cumplido y como se suele decir, de muestra un botón.

Y sin más dilación os dejo el resultado final, que seguro que ya estáis impacientes.

Nota de Cordo: Brutalísimos.

También aproveché para hacer 6 orcos negros de plástico con arma a dos manos y ya que tenía 2 campeones dejé la peana de uno sin hacer, pues tiene todas las papeletas de acabar montado en un carro.

Y para variar un poco cerramos con algo de escenografía.

Como recordaréis, teníamos pendiente terminar unas ruinas de las que ya os habíamos hablado en la última escalada. 

La idea es que pudieran servir para delimitar un área de ruinas o utilizarse individualmente como obstáculos o elementos que corten la visión.

Os dejo imágenes tanto de los elementos individuales como de una loseta con ellos integrados para que os hagáis a la idea.

Y sin más demora nos despedimos por otro mes, aunque sin tener muy claro si en septiembre traeremos alguna novedad, ya que aunque es cierto que dejamos cosas empezadas, más cierto es que os escribo esto a 19 de septiembre. 

Arturo