Buenos días y atención con la entrada de escalada de los lectores de hoy, que además de pintura incluye una encomiable tarea de restauración, conversiones y bueno...yo lo llamaría un "construye tu propia miniatura". Pero para eso os dejo con Cneus.
Buenas, legendarios!
Una vez más, como cada bimestre, volvemos a encontrarnos. Y
una vez más, como en el resto del año, vengo cargado de inmaculados Asur y de pendencieros
piratas. Aviso: es entrada larga, pero lo mejor está al final.
En la anterior entrada os mostré la Guardia del Fénix, que
había pintado hace más de 20 años y daba lástima y vergüenza. Ahora ya estaban
bonitos, pero no me gustaba tener solo 10, no quedaban bien al lado de las
otras unidades, así que encargué clones de resina para completar la unidad.
También sabéis que soy un fan de los rellenadores, así que me planteé un
rellenador que me ahorrase pintar un par de elfos y le diera personalidad a la
unidad. El resultado es el siguiente:
Al final me acabó sobrando un guardia, así que lo aproveché
para hacer foto a la unidad sin estandarte, dando más protagonismo al
rellenador. Para éste tenía claro que quería hacer que un grupo de guardias
llevasen la llama sagrada de Asuryan (esto fue antes de darme cuenta de que el
estandarte también tiene encima un pebetero con fuego). Como las minis de metal
o resina son muy difíciles de reposicionar, no había mucho margen para hacer
que los guardias llevasen la llama de forma natural, así que finalmente coloqué
a tres formando un triángulo (recordemos que el templo de Asuryan es una
pirámide) y les corté la hoja de la alabarda, enganchando el asta en el
pebetero. Éste no es más que un escudo imperial de los de la caja inicial de
6ª, con masilla verde por debajo para darle más volumen, y el fuego tiene un
núcleo de plástico (fuego de la peana del Balrog) y masilla verde para
rellenar.
El estandarte me daba algo de miedo, así que hice un par de
pruebas en papel en la misma escala, para pillar las proporciones del fénix.
Obviamente no soy un pro del freehand, pero lo hice todo de una vez y quedé
bastante contento.
Pasamos ahora a Saphery y a la Torre de Hoeth. Despinté con
alcohol los Maestros de la Espada y los personajes de este reino, además de un
águila gigante que pasaba por ahí, y me puse a darles una vida más digna.
Empezamos por el águila, una mini a la que se le nota mucho
el paso del tiempo y que desentona bastante con las águilas más modernas, pero
ahora al menos se la puede sacar de casa y ahí está, preparada para redirigir y
sacrificarse por el equipo.
Vamos con los Maestros. Aquí no tengo foto del antes, pero
os los podéis imaginar. Lo único destacable es que el portaestandarte de metal
no tiene ningún estandarte, solo lleva un palo, así que tuve que robar parte de
un estandarte de lanceros para darle algo que ondear en la batalla. El motivo de
la torre de Hoeth recortada contra la luna llena lo saqué del libro de
heráldica y uniformes de los Altos Elfos, que está lleno de recursos muy útiles (Nota de Cordo: Nunca perdonaré que solo tres facciones llegaran a tener esos libros).
Inseparablemente unido a los Maestros está Eltharion en su
mejor versión, el ciego. Nunca entendí cómo resetearon esa historia para volver
a la miniatura antigua. El caso es que el pobre Eltharion estaba en un estado
peor que en las mazmorras del Rey Brujo, como podéis ver:
Nota de Cordo: Total, tanto esfuerzo para no poder verse en el espejo...
Una mini sencilla pero con mucho carisma. Un caso similar es
el del Señor del Conocimiento, Teclis, que también tuvo una mini en 6ª que fue
olvidada en ediciones posteriores. El caso es que, al igual que Eltharion, este
Teclis no estaba en su mejor momento:
Nota de Cordo: ¡Hasta la piedra táctica ha sido mágicamente mejorada!
Y acompañando a Teclis vienen sus becarios y ayudantes:
Los conocedores habrán detectado cambios en los 3 magos que
no son Teclis. Empezando por la izquierda, me faltaba la mano de Tethan (sí,
ese mago tiene nombre según el post de Catalogando de Cargad!), así que le
conseguí otra con una espada, muy similar a la que tenía originalmente. A
continuación tenemos el mago a caballo, cuyo corcel se perdió hace años, así
que aproveché un caballo sobrante del carro de leones. A éste a su vez le
faltaba la rienda, así que la hice con masilla verde. Por último, el mago de la
derecha tampoco tenía la mano derecha, que originalmente sujeta un báculo, pero
ha acabado también con una espada. Con el orbe que lleva en la izquierda y la
espada creo que pega como Señor del Conocimiento, así que una mini que me
ahorro comprar (Nota de Cordo: ¡Me gusta más que la original!).
Y con esto terminamos los Altos Elfos y nos vamos a la Costa
del Vampiro, para encontrarnos con la madre de todos los cañones y lo que más
tiempo me ha consumido estos meses, la Reina Bess. Para quien no la conozca,
aquí tenéis una de las imágenes de referencia que utilicé, del Total War:
Mi idea básica era utilizar la popa del barco idoneth de AoS
(recordaréis que la proa la utilicé a comienzos del año para construir el
Coloso Necrofex), y ponerle unas ruedas y un tubo bien gordo como cañón. Para
el cañón tenía varias opciones, pero de ruedas andaba escaso, porque ya había
usado las del carro de cadáveres y las del carro orco con el Coloso. Solución:
utilizar peanas redondas (¡por fin tienen un uso práctico!) y ponerles masilla
verde para esculpir tablas de madera.
Aquí podéis ver esa idea inicial llevada a la práctica. Con
este primer esquema me di cuenta de que el cañón era demasiado corto y debía
estar más inclinado hacia arriba.
Extendí el cañón y estuve jugando con la inclinación y los
elementos para su decoración (la escalera está ahí solo para sujetar el cañón,
no era parte del plan). Para poder inclinarlo más hacia arriba tuve que
recortar parte de la cubierta del barco, así que la reemplacé con una sección
de escalera y unas tablas de escenografía de AoS. De esta forma, la parte
delantera de la cubierta quedaba elevada y podía colocarse por encima del
cañón, permitiendo que este apuntase hacia arriba.
En esta foto se aprecia la boca del cañón, que está
recubierta de masilla verde para enmascarar la estructura interna: el cañón se
compone de dos tubos de cartón grueso, el más estrecho en el interior del más
ancho, y con varias secciones de tubo de cartón rellenando el hueco entre ambos
tubos principales.
En cuanto a la decoración, me planteaba colocar las alas
(sacadas de un dragón oriental de Dungeons and Lasers que se puede montar sin
alas) y encima la cabeza de dragón, como elementos simbólicos, sin estar unidos
entre sí. Sin embargo, al final encontré me decidí por seguir más fielmente la
imagen de referencia, como veremos más adelante. Lo que sí se quedó ahí fueron
las dos bandas de goma eva de color gris que rodean el cañón.
Otros elementos que se quedaron en el diseño final fueron el
brasero con calaveras, sacado del carro de cadáveres, y los barriles.
Aquí veis dos avances importantes: otro par de ruedas, con
lo que llegué a la configuración definitiva, y unas tablas extendiendo la
superficie inferior del barco, para anclar ahí el eje de las ruedas delanteras
y situar entre ellas una pieza vertical que sujetaría el cañón, dándole inclinación.
¿Qué es esa pieza? Un trozo de empalizada de AoS con dos cuernos pineados
formando un arco.
Como decía, descarté la idea de la cabeza de dragón y las
alas como elementos separados e intenté recrear la figura de un mascarón de proa
atado al cañón. Para eso utilicé piezas muy variadas: una cabeza de la montura
de los Mortarcas, alas de dragón, torso y patas sobrantes del ave del escolta
celeste, y masilla verde para unir las piezas y enmascarar las plumas.
Pero el cañón necesita un mecanismo para cambiar su
inclinación: es algo que vemos en la imagen de referencia y que también
encontramos por ejemplo en el cañón infernal de los enanos del Caos. Con esas
dos referencias construí las dos estructuras a base de pinchos de empalizada,
un escudo no muerto para tapar la unión de las piezas, y una sección de rueda
dentada hecha con un trozo de madera fina que tenía ahí tirado.
Soy consciente de que es poco práctico, porque los pinchos
estorbarían a la hora de variar mucho el ángulo del cañón, pero los he dejado
porque mola más con pinchos xD. Hablando de pinchos, también sembré de ellos
las bandas de goma eva que rodean el cañón, y añadí algo de cuerda y unas
calaveras.
Aquí se puede ver el mástil completo. La cofa del vigía está
hecha con el carro orco de la caja de 6ª edición, y el remate del mástil, con
el cabo enrollado y el simpático pirata colgando, era de uno de los cangrejos
que pinté hace unos meses. En uno de ellos metí a la vampiresa de mi ejército,
así que este se quedó sin montura hasta ahora. Ha salido ganando.
Aproveché la cuerda enrollada en lo alto del mástil para
colocar cuerda de verdad y atarlo a la esquina del barco, dándole más
estabilidad y permitiéndome colocar un trozo de malla que envolvía unos ajos, y
que se ha convertido en la red para subir a la cofa del vigía.
En la parte inferior de la foto podéis ver cómo en las
tablas que van por encima de la cubierta coloqué un timón (el músico de la
unidad de piratas zombis de Lost Kingdom lo llevaba en la espalda, pero creo
que aquí queda mejor). Lógicamente el timón tiene pegado a su timonel, y al
lado una ratilla para hacerle compañía.
Y por fin, después de toda esta chapa sobre el paso a paso
de la construcción, vamos a ver cómo la Reina Bess cobra vida, con color y más
detalles decorativos que le fui añadiendo:
El pintado ha sido bastante exprés y terminé justo a tiempo
para la escalada, el 31 de agosto. Podría haberme metido más en algunos
detalles, pero es una mini tan enorme que sería el cuento de nunca acabar, y
creo que el conjunto ha quedado imponente tal como está. Se ha convertido en la
pieza central de mi ejército de Costa del Vampiro, y aunque hay algunas
alternativas de impresión 3D, me da una satisfacción especial haber creado mi
propia versión.
Y hasta aquí hemos llegado. Si vamos a los objetivos
anuales, tengo dos más que completados y otros dos sin tocar.
Todavía veo factible el objetivo de Stormbringer, pero
Bretonia empieza a sentirse lejano, sobre todo porque hay más Altos Elfos en el
horizonte: este mes he caído con el fénix y con la Doncella de la Reina Eterna,
tengo aún sin pintar los 2 héroes que compré en junio, y ya que pedí los
guardias del fénix de impresión 3D, pedí también 4 príncipes dragón, porque mi
unidad era de 6 y me daba TOC tanto poner una fila de 6 como dejar uno solo
atrás. Necesitaba la unidad de 10 xD.
En resumen, han entrado minis, pero he pintado más, y el
saldo está en un saludable -87. ¿Qué vendrá a continuación? Lo descubriremos en
un par de meses.
¡Hasta la próxima entrada!
Impresionante, magnífico y espectacular. Me quito el sombrero ante semejante obra de arte. Mis 10's!! Ojalá hagamos un enfrentamiento espejo de Costa VS Costa ;)
ResponderEliminarSaludos!!
Trabajazo! Esa conversión es de 10.
ResponderEliminarQue Besstia. Dan ganas de irse a asediar Constantinopla.
ResponderEliminarTe quedó espectacular, pero viendo la peana y por ponerle alguna pega, yo creo que esas ruedas tenderían a enterrarse en la arena. Quizás unas rudimentarias orugas de madera...